Lo de Navarro es espectacular. La semana pasada anotaba 28 puntos saliendo desde el banquillo con un 8 de 9 en triples que le hacían entrar de cabeza en los libros de historia del baloncesto americano. Ayer frente a los Washington Wizards volvió a anotar 28 puntos, siendo el máximo anotador de su equipo. Además logró un 5-8 en triples, un 10-14 en tiros de campo, 4 asistencias y 2 robos en 37 minutos de juego. Aunque pueda parecer muy similar a lo logrado la semana pasada frente a los Hornets, hay dos diferencias que para mi van más allá de la gran anotación del español: salió de titular y su equipo ganó.
Juan Carlos Navarro comienza a hacerse notar en la NBA. Los comentaristas y analistas americanos, tan reacios a veces a ensalzar a los extranjeros (y más si son novatos), lo están flipando con el español. Y es que nos está dando razones de sobra para soñar con el Rookie del Año. ¿Por qué no?